Descubre la experiencia gastronómica que rinde culto a la ternera de La Janda y a los sabores de la tierra gaditana.
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Si eres de los que no perdonan una buena carne a la brasa, el Fogón de Mariana en Cádiz es una parada obligatoria. Este restaurante, con varios locales repartidos por la provincia, se ha ganado el paladar de quienes buscan calidad, producto local y tradición.
La estrella indiscutible del Fogón es la ternera con Denominación de Origen La Janda, criada en libertad en una de las comarcas más fértiles de la provincia. Jugosa, sabrosa y con el punto exacto de brasa, esta carne se sirve en cortes generosos ideales para compartir.
Recientemente, hemos podido visitar el renovado local de la Calle Brasil, a pocos pasos del Paseo Marítimo de Cádiz. El restaurante ha cambiado de estilo, con una reforma integral, que ofrece diferentes espacios, para disfrutar de una experiencia única. En primer lugar, nos encontramos con la planta baja, en la que llama mucho la atención los espacios reservados, a una altura superior, con elegantes sofás, que son ideales para momentos muy especiales. Además, nos encantaron, dos nuevos espacios, uno más familiar, situado al fondo y uno más informal, destinado a eventos más desenfadados o catas de vino, que han bautizado como el «Salón La Cava». Si nos vamos al nivel superior, nos encontramos un salón más amplio, ideal para celebraciones, con una combinación de colores y un estilo espectacular.
Nuestra experiencia en este nuevo Fogón de Mariana, comenzó con una tabla de ibéricos, con lomito de presa ibérica, jamón ibérico y queso viejo de oveja curado en manteca, una grandísima opción para compartir, con unos ibéricos de mucha calidad. Pero veníamos dispuestos a probar una sartén de huevos fritos que habíamos visto recientemente en las redes sociales del Fogón, la sartén de huevos fritos, con langostinos y pulpo al ajillo. Y no nos defraudó, y que la combinación de sabores, es una pasada.
La joya de la comida fue la ternera de Denominación de Origen La Janda: tierna, jugosa, cocinada en su punto justo y con ese sabor característico que solo tiene la carne criada en libertad en el campo gaditano. El chuletón de ternera tienes la opción de verlo antes de que lo cocinen y certifican su peso exacto, en nuestro caso fué más de 1,200 kg de chuletón.
Y como colofón, una tarta tradicional de natillas con galletas que nos llevó directos a la infancia. Cremosa, dulce en su justa medida, y perfecta para cerrar la experiencia.
Lo que más nos gustó del Fogón de Mariana es su apuesta firme por el producto de cercanía. Desde los ibéricos hasta la carne de La Janda, pasando por los langostinos y el pulpo, todo sabe a verdad. Aquí no hay trampa ni cartón: hay fuego, tradición y mucho amor por la cocina. Así que tenéis que vivir la experiencia de primera mano.
Más información:
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📍 Dirección: Calle Brasil, 1
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☎️ Reservas por web o teléfono
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📖 Carta Fogón de Mariana
